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El uso de los semilleros plásticos es continuo desde la siembra hasta la plantación. Mantienen y protegen la planta durante su crecimiento y la sostienen durante su transporte al lugar de siembra. Una vez vaciados, se limpian y quedan listos para el siguiente ciclo de siembra. Requieren de poco espacio para almacenar y transportar, puesto que son apilables.
Este novedoso sistema facilita el control fitosanitario, la producción, la reproducción y el trasplante, con excelentes resultados prácticos. La separación entre sí de las plantas y el subsiguiente trato individual produce una buena formación de raíces, por tanto, absorben mejor los nutrientes del sustrato.
Este sistema produce plantas vigorosas. Comparado con sistemas menos avanzados, disminuye considerablemente el índice de mortalidad y produce finalmente plantas más uniformes y un mayor rendimiento en la cosecha.
DESARROLLO RADICULAR DIRIGIDO: las venas verticales en cada cono dirigen el crecimiento de las raíces en forma recta hasta el fondo del cono, previniendo la espiralización (las raíces al alcanzar el fondo del recipiente tienden a enrollarse sobre sí mismas) y el ahorcamiento entre raíces. Fomentan un excelente desarrollo radicular con bastantes raicillas secundarias que anclan muy bien las plántulas.
PODA NATURAL Y CONTROL DE MALEZAS: colocar los semilleros sobre una cama de alambres evita que los conos toquen el suelo y expone al aire las aperturas en el fondo de los conos. Como el semillero no está sobre el suelo, las malezas no pueden entrar a competir con la plántula y no hay problemas de drenaje.
Una vez la plántula ha conseguido el tamaño adecuado para enviarse al campo, la poda de la raíz limita el crecimiento en el vivero hasta que se transplante. Esta particularidad permite en cualquier momento aumentar la estadía en el vivero debido a problemas de programación de siembra en el campo.
DESARROLLO UNIFORME: la densidad constante de siembra, la poda natural de la raíz y la disponibilidad constante de tierra, agua, luz y nutrientes, producen un desarrollo uniforme de la siembra.
AHORRO DE ÁREA DEL VIVERO: el sistema de semilleros plásticos sobre una cama de alambre exige menos área de vivero que muchos métodos anteriores, por ende, reduce también los costos de riego.
FÁCIL Y RÁPIDO LLENADO: la rigidez y forma compacta de los semilleros permite un llenado fácil y rápido.
AHORRO DE SUSTRATO: el cono de un semillero plástico se llena con menos sustrato que el tubo de una bolsa plástica.
FÁCIL EXTRACCIÓN: la apertura en el fondo del cono permite fácil extracción de la plántula en el momento del transplante. Adicionalmente, una herramienta especial permite la extracción simultánea de todas las plantulas de un semillero.
HIGIENE Y ESTERILIZACIÓN: Un lavado con hipoclorito diluido al 10% evita el contagio de hongos y bacterias.
LARGA VIDA Y REUTILIZACIÓN: El uso de polietileno virgen de alta densidad (HDPE) y de un aditivo resistente a la luz ultravioleta, producen semilleros perdurables y resistentes. Tienen una vida útil entre 8 y 10 años.